Al considerar la venta de una propiedad, es importante que todo esté controlado. Uno de los pasos más importantes a seguir es obtener un certificado energético de la vivienda. Este documento está obligado por ley a actualizarse para la venta o alquiler de inmuebles. Se trata de un documento que refleja los niveles de energía de tu hogar e indica si el inmueble es eficiente a nivel energético. De esa manera, saber esto permitirá que tanto los propietarios como los posibles compradores o inquilinos sepan cómo pueden mejorar la energía de su hogar.
Aunque no tengas intención de vender tu piso, te recomendamos encarecidamente que también obtengas este certificado. ¿Sabes por qué?
En primer lugar, ya es obligatorio. A partir de 2013, los propietarios que planean vender o alquilar bienes inmuebles deben obtener este certificado antes de vender. Este certificado también debe estar incluido en el registro de la propiedad inmobiliaria.
Segundo, porque proporciona mucha información sobre la casa. Por otro lado, si el atributo es muy eficiente, el valor será alto, pero si no, también proporcionará información sobre cómo mejorarlo.
Sin embargo, puede haber excepciones por las que no es necesario tener este documento:
- Edificios de menos de 50 metros cuadrados
- Estructuras temporales con menos de 2 años desde su construcción
- Talleres no residenciales
- Edificios religiosos y de culto
- Monumentos protegidos
Te explicamos más detalles en Fotocasa.
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