Aunque se escriben muchos detalles y consejos sobre el mundo de la decoración, no existen unas normas fijadas a las que debas ceñirte. Por suerte, en el mundo del diseño casi todo es válido. Nuestros hogares deberían verse tan diferentes y únicos como lo son nuestras personalidades. Sin embargo, es posible que en algunos casos cometamos errores que podrían y deberían evitarse en el intento de darle a nuestra casa un estilo destacado. En este artículo te contaremos algunos de los errores más comunes y que podrías hacer para solucionarlos de forma sencilla.
Elegir una mala distribución
Otro de los errores más comunes de la decoración es elegir una mala distribución del mobiliario y otros elementos. Por un lado, evita llevar todos los muebles junto a las paredes, ya que aunque consigas una sensación de mayor espacio, puede dejar una zona central aburrida y triste. Puedes incorporar una alfombra o mesa central con personalidad para que genere un espacio más expositivo y vivo. Por otro lado, trata de distribuir todos los muebles de forma óptima e inteligente, así evitarás convertir la casa en una carrera de obstáculos.
Planificación insuficiente
La planificación es la clave de la decoración. En ocasiones vemos objetos o muebles muy atractivos, que pensamos que darán una excelente imagen en nuestra estancia, sin embargo una vez ya lo tenemos en el lugar deseado, nos damos cuenta que no hay forma de encajarlo. También es un error muy común en el momento de pintar, ya que en ocasiones pintamos la casa sin probar previamente la pintura. Esto debería ser fundamental, ya que existen ciertos colores que pueden modificar su apariencia una vez aplicados en la pared. Lo ideal sería revisar el color a la luz natural del día, y contrastar como se verá en otras situaciones de iluminación y con los muebles alrededor. De esta forma ahorrarás en decepciones, tiempo y dinero.
Diferenciar
Trata de elegir elementos y estilos únicos y que no se repitan a lo largo de todo el espacio. Es decir, para elegir los cojines, las persianas, los tapizados y otros elementos decorativos, busca colores y patrones que coordinen entre ellos, pero sin que colapsen o creen un ambiente demasiado sobrecargado y repetitivo.
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