Las habitaciones para estudiantes en pisos compartidos también suben de precio, especialmente cuando se acerca el curso. Los datos señalan que, según se va acercando el inicio del curso, los precios de las habitaciones para estudiantes pueden llegar a crecer hasta en un 24%. La encuesta realizada entre los propietarios de este tipo de viviendas ha mostrado como el 74% de ellos sube los precios cada año. Un 47% reconoce hacerlo una vez, mientras que el 12% llega a 2 veces, siendo el 6% quien lo hace hasta en tres ocasiones.
El factor principal para estas subidas de precio es la demanda. Cuando termina el verano y se acerca el mes de septiembre, muchos estudiantes rezagados que aun no han solucionado su alojamiento para el curso empiezan a buscar. Esta situación es aprovechada por los propietarios, que ven la oportunidad de cambiar los precios a última hora. Estas subidas son marcadas principalmente por el contexto, ya que cuando llegan los cambios de curso los precios bajan y las dificultades para alquilar las habitaciones aumentan. Estos dos momentos del año son al principio del verano y en navidades, cuando terminan los semestres escolares. Fuera de estos dos momentos concretos, la variación de precio siempre suele ser al alza, como reconocen el 35% de los propietarios.
Respecto a sus preferencias, el 42% de los propietarios señala que prefiere alquilar a estudiantes que vayan a permanecer en la vivienda al menos durante 6 meses. También se decantan antes por un alquiler de 1 año que de 3. Esto les permite disponer de la vivienda durante las épocas vacacionales, dándoles la opción del alquiler turístico. Entre las grandes ventajas de esta modalidad de alquiler destacan la elevada demanda, la puntualidad en los pagos y la alta rentabilidad que ofrece sobre otro tipo de arrendamientos.
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