La banca posee muchos de los activos inmobiliarios de nuestro país como consecuencia de la crisis económica. Gracias a la dinamización del mercado inmobiliario, las entidades financieras españolas están registrando unos volúmenes de ventas de inmuebles acordes con sus necesidades de ingresos. Durante los primeros seis meses del año los bancos han llegado a vender hasta 37.500 viviendas, lo que supone un aumento de un 9% respecto al mismo período de 2015. Esto les reportó unos ingresos de 4.860 millones de euros, unos 27 millones de euros al día.
Es interesante observar que, pese a que la cantidad de pisos vendidos es la misma que la del año pasado durante el primer semestre del año, los ingresos son superiores en un 9% debido, precisamente, al aumento del precio de la vivienda que señalábamos en publicaciones anteriores.
Por entidades, Banco Popular destaca por encima del resto con hasta 5.227 viviendas vendidas por un valor de más de 1.000 millones de euros. Este dato no es casual, pues Popular es la entidad que más patrimonio inmobiliario tiene en cartera con unos 30.000 millones de euros entre activos adjudicados y préstamos morosos. Por detrás de Banco Popular vienen Banco de Santander y Banc Sabadell, cuyos traspasos de activos inmobiliarios les han permitido ingresar 994 millones y 974 millones, respectivamente. Caixabank es la cuarta entidad que más dinero ha conseguido ingresar en este sector, 610 millones de euros, seguida de BBVA, con 529 millones, si se incluyen los traspasos de activos en balance de promotores.
Este contexto es positivo pero todavía queda camino por recorrer. Y es que, según un informe del Banco de España, el sector bancario tiene aún unos 213.000 millones de euros en activos adjudicados y préstamos dudosos, una cantidad que equivale a una quinta parte del PIB español.
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