El tópico de querer tener en una gran casa para irnos de vacaciones ha topado con la cruda realidad. Al menos eso es lo que BBVA afirma a partir de una encuesta elaborada por la entidad, cuyo resultado principal es que el 66% de los compradores potenciales de segunda residencia en la costa española optaría por adquirir un piso antes que por un chalet. Según BBVA, esto se debería a que los españoles preferimos la comodidad y practicidad de un piso por encima del lujo y confort que podría proporcionar una torre.
Otra de las conclusiones es que Andalucía, con un 40% de las respuestas, es la comunidad autónoma predilecta para compra una vivienda para las vacaciones. Les siguen la Comunidad Valenciana con un 20% y Catalunya, debido a la diversidad de sus paisajes y playas, atrae a otro 12%. El cuarto lugar lo ocupa Galicia con un 6% de las respuestas. Baleares y Canarias comparten el quinto puesto con un 5% cada una.
En cuanto a la capacidad del inmueble, un 48% de los encuestados prefiere un piso con dos habitaciones y un 33% optaría con una vivienda con tres dormitorios. El gasto máximo medio que el 99% de los encuestados están dispuestos a asumir en su segunda residencia en la costa española es de 100.000 euros. Tan sólo un 1% de la muestra estaría dispuesto a aumentar esa cantidad hasta los 200.000 euros.
Y, ¿dónde queremos que esté ubicada nuestra segunda vivienda costera? Los datos son claramente favorables a estar próximos a la playa, con un 76% de las preferencias. El 24% restante preferiría un lugar algo más apartado y silencioso, alejado de la masificación turística y las zonas destinadas principalmente al ocio nocturno.