El mercado de la vivienda en España está viviendo una reactivación evidente debido a la recuperación de la economía española y también gracias a la elevada demanda que registra por parte de compradores de vivienda locales y extranjeros. Y es que cada vez son más los inversores de otros países que ven en los bienes inmobiliarios una buena oportunidad, ya sea con fines residenciales o de inversión.
En este sentido, el Ministerio de Fomento ha puesto cifras al creciente interés extranjero por nuestro parque de viviendas. Así, según Fomento, los extranjeros residentes en España llevaron a cabo transacciones inmobiliarias por un total de 11.500 millones de euros durante el pasado año. Esto significó una escalada del 15,5% en 2016 respecto a los resultados obtenidos en 2015, que fueron de 9.953 millones de euros.
De la cantidad total desembolsada por este tipo de comprador, la vivienda de segunda mano acaparó la mayoría del dinero invertido, con un total de 10.281 millones. Mientras, el mercado de obra nueva supuso la inversión de 1.219 millones de euros. Si se comparan estas cifras con las que se dieron en 2015, la evolución al alza se hace patente. Y es que en comparativa interanual el valor de las operaciones inmobiliarias ligadas a compraventas de viviendas de segunda mano creció un 16,3%. Por su parte, la inversión en operaciones de viviendas de obra nueva creció un 9,7%.
En lo que respecta a la distribución por comunidades autónomas del dinero invertido, la Comunidad Valenciana centró el protagonismo siendo la autonomía en la que se destinaron más recursos para la compra de viviendas, con 2.578 millones de euros. Le siguieron Andalucía, con 2.393 millones de euros, y Catalunya, con 2.135 millones de euros. Por provincias, Alicante (2.187 millones de euros) y Málaga (1.950) fueron las dos más destacadas.