A finales del mes de agosto la ciudad de Barcelona empezó la construcción de sus primeros pisos con contenedores de barco reciclados. Se inicia así la construcción y la prueba piloto del primer módulo ubicado en el céntrico barrio de Ciutat Vella. Esta medida, es una solución arquitectónica habitual en varias ciudades europeas como Ámsterdam o Copenhague, donde ya existen barrios enteros de contenedores que albergan viviendas. El objetivo del Ayuntamiento y de la constructora es que se realicen los trabajos durante tres meses para disponer de los doce apartamentos de una o dos habitaciones, de 30 o 60 cuadrados respectivamente, que albergarán familias que se encuentran en situación de vulnerabilidad.
La teniente de alcalde de Derechos Sociales, Laura Pérez, destaca que “el objetivo es reducir la presión sobre la mesa de emergencia con estos alojamientos ya que se pueden construir de manera más rápida barata y sostenible que las construcciones de obra”. Además, aunque inicialmente están destinados a albergar familias en situación de vulnerabilidad, la teniente de alcalde deja la puerta entreabierta a incorporar en el futuro otros colectivos que enfrentan dificultades, como podrían ser los jóvenes. Desde el consistorio se refieren a este tipo de construcciones como APROP, alojamientos de proximidad provisionales, que tienen un coste entre un 25% y un 40% inferior a las edificaciones convencionales, y su tiempo de realización, incluyendo la fase previa administrativa, puede llegar a ser de siete años, rebajando en este caso en quince meses, y pasará a ser de nueve cuando el sistema esté más rodado. La construcción de los mismos pasa de los 18 o 24 meses de media actuales a solo tres meses para disponer de la vivienda.
Con una vida útil de unos 75 años, parecida a la de los inmuebles convencionales, el Ayuntamiento tiene la intención de colocar estos módulos en solares donde se levantará vivienda pública y solo estarán allí hasta que se ponga en marcha la edificación definitiva, para trasladar los contenedores a otros terrenos similares para cumplir una función parecida. Junto con otros dos proyectos previstos, uno en Sant Martí y otro en Sants- Montjuic, se estima un coste total de alrededor de 7 millones que permitirán la construcción de 94 nuevos alojamientos en la ciudad.
Un comentario
Me urge un piso social soy madre soltera a cargo con un hijo menor