¿Sabías que tener un piso es cada día más rentable en España? El rendimiento medio bruto anual de la vivienda se sitúa en el 10,9%, si se tienen en cuenta las últimas cifras publicadas por el Banco de España referidas al primer trimestre de este año. En los últimos tres meses de 2015, este indicador se situaba en el 8,8%, lo que ofrece una clara idea de la aceleración progresiva del sector. La rentabilidad de un inmueble que se pone en alquiler genera un 4,6% adicional de rentabilidad, según el órgano regulador. Esta cifra es la mayor registrada en los últimos 9 años, desde el tercer trimestre de 2007, coincidiendo con el pico de la burbuja inmobiliaria.
La rentabilidad bruta se calcula a partir de la medición combinada entre el aumento de valor de la vivienda con la renta que se obtiene antes de impuestos cuando el piso es puesto en alquiler. Por lo tanto, más allá de considerar lo que el propietario del piso obtendrá al arrendar el inmueble, también se calculará lo que obtendría al cabo de doce meses en caso de venderlo.
Esta cifra gana importancia en un contexto de tipos de interés deprimidos, en el que las inversiones alternativas a la renta fija ganan en atractivo. La diferencia entre la rentabilidad de la vivienda y el resto de los activos establece un momento propicio para invertir en pisos para alquilar, tanto por parte de compradores particulares como por parte de empresas especializadas, ya que el coste de los préstamos hipotecarios está en mínimos históricos, un 0,3%.
Además, la alta rentabilidad va de la mano de un escenario en el que el porcentaje de españoles que prefiere alquilar a comprar sube del 19% al 21,2% en 2015, según el INE. En este sentido, en los tres últimos años el mercado del alquiler ha sumado más de un millón de pisos y ha crecido un 42,5%.
