El Colegio de Arquitectos de Catalunya (COAC) hizo públicos este lunes los datos relacionados con la construcción del año pasado. En estos, se observa una recuperación del sector de la edificación en Catalunya, aunque no con la celeridad deseada. Si el número de proyectos visados aumentó un 15% en Catalunya respecto al año 2017, con unos 4,5 millones de metros cuadrados, en Barcelona se desploman por segundo año consecutivo y suma una caída del 20% en relación con el 2017, cuando fue del 13%.
La caída afecta especialmente a los proyectos más grandes, aquellos que superan los 10.000 metros cuadrados y coincide con las nuevas normas impulsadas por el Ayuntamiento de Barcelona. Tanto el Plan Especial Urbanístico de Alojamientos Turísticos (PEUAT), que regula la implantación de alojamientos turísticos en la ciudad; como la exigencia para que los promotores privados destinen un 30% de los pisos que construyan a vivienda social, están vinculados con la caída de proyectos. Además, la lentitud con la que el Ayuntamiento de Barcelona tramita las licencias, por la falta de técnicos preparados, perjudica también a la llegada de inversores. Es más, la caída de proyectos de rehabilitación y la falta de construcción de viviendas para satisfacer la demanda, son las principales preocupaciones para los expertos del sector.
Analizando los datos del Colegio de Arquitectos, observamos como en Catalunya la superficie en metros cuadrados de los proyectos visados por el Colegio crece hasta llegar a los 4.503.486 metros cuadrados, un 25,8% más que en 2016 (3.579.960 metros cuadrados). Y pese a que los mismos datos muestran un crecimiento del 34,64% en la provincia de Barcelona, la capital catalana sufrió una caída del 30,09%, hasta llegar a los 532.950 metros cuadrados en 2018, mientras que en 2016 llegó hasta los 762.379 metros cuadrados.
