¿Sabes qué son las viviendas sostenibles? Descubre todos sus beneficios

Cada vez son más las personas concienciadas con el respeto por el medio ambiente y por la búsqueda de alternativas menos perjudiciales para el entorno y que permitan un desarrollo sostenible y un mayor ahorro.

Una casa sostenible es aquella que permite cubrir todas nuestras necesidades domésticas sin que suponga un compromiso para el medio ambiente ni para las futuras generaciones.

Si históricamente las viviendas se construían como espacios únicamente destinados a dar cobijo a las personas, en la actualidad se busca que además sean respetuosas con el medio ambiente y más saludables para todos.

Hoy en día, conceptos como la arquitectura verde o las casas sostenibles son ya muy populares en el mundo de la construcción. El actual modelo de construcción se basa en diseñar casas capaces de ahorrar energía y que sean lo más respetuosas posibles con el entorno.

¿Cuáles son los beneficios de las viviendas sostenibles?

La evolución actual del sector inmobiliario hacía prácticas más sostenibles está siendo muy positiva y nos permite ser optimistas de cara al futuro.

Poco a poco, los valores de la sostenibilidad se han ido arraigando y ha permitido que el sector se profesionalice, hasta el punto de marcar algunos valores fundamentales respetuosos con el medio ambiente tanto para la construcción como para el día a día de las viviendas.

Las dos vías para alcanzar la sostenibilidad son:

• Por un lado, hacer que edificios, viviendas y oficinas sean lo más eficientes posibles a nivel energético.
• El proceso de construcción se consuman la menor cantidad de recursos posibles.

Los expertos creen que fomentando la compra, la rehabilitación y la construcción de viviendas sostenibles, no solo permitiría un ahorro de más de 4.000 euros anuales a cada hogar, sino que también reduciría muy significativamente la contaminación en el medio ambiente. Se estima que sector inmobiliario es responsable de aproximadamente el 40% de la contaminación global que se produce, por eso el impacto del ecologismo en la vivienda es tan grande.

Además, en las fases de construcción, vida útil y demolición de un edificio se consumen grandes cantidades de energía. En concreto, se estima que la energía consumida en España por el sector de la construcción, gira en torno al 30% y el 40% del total del gasto energético y tiene grandes perjuicios para el medio ambiente.

¿Qué puedes hacer para tener una casa más sostenible?

Ya sea porque eres propietario de una vivienda o un franquiciado inmobiliario, contar con una casa sostenible es una gran ventaja.

Además, aunque pueda parecer sorprendente, la inversión necesaria para lograr este tipo de viviendas no es muy diferente los precios de una construcción convencional. En algunos casos incluso, el coste de la construcción de una vivienda ecológica puede ser inferior al de una edificación normal, ya que existen distintos tipos de financiación que premian las viviendas respetuosas con el medio ambiente.

Un inmueble que cumple con los estándares óptimos de eficiencia permite reducir hasta un 80% la energía necesaria en condiciones normales. Además, este tipo de viviendas llegan a tener unos gastos de funcionamiento y mantenimiento hasta un 8% inferior respecto de las viviendas que no cuidan el medio ambiente.

Por eso, ya sea en construcción como en rehabilitación, trata de usar tanto como puedas materiales que no dañen el medio ambiente y que sean lo más eficientes posibles. Una óptima orientación del edificio y de los espacios interiores también permitirá un mayor ahorro, ya que permitirá sacar el máximo provecho de la luz solar.

Asimismo, la utilización de paneles solares que generen energía limpia o un óptimo aislamiento térmico, son soluciones de mucha efectividad en el ahorro energético.

Otro punto clave de las viviendas sostenibles es el ahorro en el uso del agua, que puede llegar a ser hasta un 40% inferior a las viviendas tradicionales. No se trata solo del ahorro económico, sino de evitar el desperdicio de uno de los elementos de la naturaleza más vitales.

Pequeños gestos como no usar todo el depósito de agua al tirar de la cadena, sellar las fugas o disponer de sistemas inteligentes para el riego, son fundamentales contar con una casa realmente sostenible.

Además, no hay que olvidar que, en el mercado, una vivienda rehabilitada para ser más sostenible puede incrementar su valor de tasación hasta en un 25%. De tal modo que dispondrás de un inmueble menos expuesto a contratiempos, con una mayor vida útil de sus equipos, con costes de energía más bajos y que permite un ahorro de dinero que resulta rentable.