El último Informe de Tendencias del Sector Inmobiliario de ST Sociedad de Tasación para el primer trimestre de 2016 nos ha dejado una cifra un tanto alarmante: en España hace falta una media de 7,6 años de sueldo íntegro de un asalariado normal para pagar una vivienda cuyo precio medio se sitúa en 1.433 euros/m2.
No obstante, esconde una interpretación mucho más positiva puesto que se trata de una ligera variación respecto a los precios registrados en 2015. Según la tasadora, esta mínima variación confirma la continuidad de la estabilidad en un mercado que se reactiva lentamente pero cuyo impulso todavía parece insuficiente para hacer crecer los precios de manera generalizada. De hecho, este nivel de esfuerzo nada tiene que ver con los registrados en pleno boom inmobiliario cuando se alcanzaron cifras que alcanzaron los 13,7 años en 2007.
Lo más destacado es la variabilidad entre los precios por comunidades, donde hay que tener presente que los precios más altos se encuentran en País Vasco (2.093 €/m2), Madrid (2.024 €/m2) y Cataluña (1.886 €/m2) mientras que en Baleares (15,8 años), Cantabria (9) y Madrid (9) son las comunidades donde más años de esfuerzo salarial es necesario emplear para comprar casa.
Como decíamos, la capacidad de los consumidores para poder comprarse una casa se mantiene en los 7,6 años del sueldo íntegro de un asalariado medio, aunque es ligeramente superior al registrado en el trimestre anterior (7,4 años) y se mantiene prácticamente igual que en 2013 con 7,6 años de media al año de esfuerzo salarial. Sólo en 2014, la media bajó a 7,2 años. Por regiones, Baleares sigue siendo la comunidad donde más le cuesta comprarse casa a un trabajador con salario medio a comienzos de 2016, con 15,8 años, mientras en Murcia el esfuerzo en Murcia apenas supone 5,4 años de sueldo.
Este indicador de ‘esfuerzo económico’ se calcula, a nivel de Comunidad Autónoma, a partir del cociente entre el valor de mercado de la vivienda y los ingresos medios brutos anuales que publica el INE en su encuesta anual de estructura salarial.
