Ahora que se acerca el verano, los mercados de vivienda de las principales zonas costeras son los que registran un mayor aumento de la demanda para la compra y alquiler de pisos. Uno de esos mercados es el del archipiélago canario, cuyo dinamismo depende en gran medida de las operaciones que se cierran con propiedades inmobiliarias que están dedicadas al uso vacacional.
En este sentido, el Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) ha decidido tomar en consideración parcialmente el recurso interpuesto por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), de noviembre de 2015, contra el decreto aprobado para el Reglamento de las viviendas vacacionales de la Comunidad Autónoma de Canarias. En el texto, publicado en mayo de 2015, se introducía una nueva regulación para el sector inmobiliario por la que se establecían ciertas normas para el alquiler privado de inmuebles y ponía fin a la desregulación total sobre el tema.
En este sentido, la CNMC consideraba en su recurso que, a partir de la normativa de promoción de la competencia y de los principios de regulación económica eficiente, ese decreto ponía obstáculos al buen funcionamiento del mercado y perjudicaba así a los ciudadanos de las islas. Entre los más destacados figuraban la prohibición de que las viviendas que fueran a ser arrendadas con fines vacacionales estuvieran ubicadas en zonas de máxima concentración turística. De hecho, excluía de las zonas permitidas a aquellas que ya tuvieran oferta hotelera previamente y prohibía el alquiler de habitaciones de forma separada.
Pues bien, considerando el recurso que se interpuso ante el TSJC, que se acompañó de un informe económico en el que se analizaban los efectos de las prohibiciones y una hipotética falta de justificación de esa regulación restrictiva, los tribunales finalmente sí han permitido la existencia de viviendas vacacionales en zonas turísticas por considerar que esa regulación favorecía a la oferta hotelera tradicional, lo que supone un punto de inflexión para el mercado vacacional de la vivienda en Canarias.