A menudo comentamos que el parque de viviendas español adolece cierta obsolescencia debido a que tampoco hay tanto suelo disponible como para seguir edificando pisos nuevos al ritmo en el que se hiciera en el pasado y porque muchos de los que ya están construidos vienen necesitando una reforma. No obstante, la antigüedad de los edificios residenciales no es un obstáculo para que sean los que mayor valor tienen para los compradores.
Y es que, según un informe elaborado por el portal pisos.com, los pisos con más de 50 años tienen un precio medio de 257.518 euros, los más caros de las ciudades españolas. Este dato supone un claro contraste con el resultado que se obtuvo en esta misma categoría en el estudio relativo al año 2016, cuando los que registraban un precio más elevado fueron los que tenían una antigüedad inferior a cinco años, con un precio medio de 217.423 euros. No obstante, el precio medio de los pisos de reciente edificación ha descendido un 19% en el último año, pues el precio medio de este tipo de viviendas en España es de 175.625 en la actualidad.
Así pues, los pisos de más de cinco décadas desde su construcción, que fueron los segundos más baratos en 2016 con un precio medio de 183.055 euros, hoy registran un aumento interanual del 41%. Mientras, los inmuebles con entre 30 y 50 años de antigüedad tienen hoy por hoy un coste medio de 201.393 euros, una cifra que supone un aumento más que notable teniendo en cuenta que se trató de la categoría de piso más barata en la edición de 2016 de este informe, con un precio medio de sólo 157.564 euros (-28%). Por último, cierran el ranking las viviendas que tienen entre 5 y 10 años, con un aumento interanual del 20% hasta los 222.251 euros.