El mercado hipotecario español sigue confirmando las previsiones: una paulatina desaceleración de las operaciones. La subida drástica del Euríbor, el índice al que están referenciadas la gran mayoría de las hipotecas a tipo variable en España, es un factor determinante. También lo es el incremento de la vida en general y de la financiación en particular, provocado por la subida de los tipos que el Banco Central Europeo viene aplicando desde julio.
Así pues, desde el inicio de los cambios en la política económica y monetaria se aprecia una desaceleración lógica en la marcha del mercado hipotecario. En este sentido, el Instituto Nacional de Estadística (INE) ya ha dado a conocer las cifras sobre la concesión de estos préstamos del pasado mes de noviembre. Según el informe, este indicador registró un aumento interanual del 9,3% hasta superar las 39.000 firmas de hipotecas, el mayor dato desde 2010, pero cuatro puntos más bajo que el aumento interanual registrado en octubre.
El ajuste es lógico, no hay por qué preocuparse
En este contexto, nuestro subdirector general, Emiliano Bermúdez, hace un balance positivo de la evolución del mercado hipotecario. “Que el volumen de contratos tienda a la baja era esperable, pues veníamos de unos años con un muy elevado número de operaciones con muy buenas condiciones de financiación. El encarecimiento de las hipotecas a tipo variable entraba dentro de lo esperado hace un año, por lo que la situación actual refleja esa tendencia que ya habíamos vaticinado y compartido con nuestros clientes. No obstante, sigue siendo un buen momento tanto para comprar como para vender”, informa el experto.
De hecho, la firma de hipotecas sobre viviendas encadena ya veintiún meses consecutivos de ascensos interanuales. El encarecimiento de la financiación provoca que el importe medio de las hipotecas sobre viviendas creciera un 5,8% interanual en noviembre hasta superar los 147.000 euros, mientras que el capital prestado se incrementó un 15,6%, hasta los 5.804 millones de euros. En el penúltimo mes del año pasado el tipo de interés medio para el total de préstamos hipotecarios quedó fijado en el 2,73%, con un plazo medio de 24 años.
