Si ayer hablábamos de que nos encontramos en un muy buen momento para la compra de inmuebles en España, realidad que es percibida por buena parte de la población, hoy nos centramos en un elemento del sector inmobiliario que es determinante a la hora de llevar a cabo esa adquisición: la solicitud de una hipoteca. La cantidad de dinero que los compradores necesitan para poder completar la operación de compraventa de un inmueble es un muy buen indicador para analizar el mercado de la vivienda y prever qué evolución puede esperarse en el corto y medio plazo.
En este sentido, la Asociación Hipotecaria Española (AHE), uno de los organismos de referencia en materia hipotecaria, ha señalado en su último informe que el importe medio de los préstamos hipotecarios fue de 98.480 euros en 2016, mientras que el plazo medio de amortización disponible para casi el 90% del total de préstamos llegó a los 18,38 años. Los datos fueron obtenidos a partir del análisis de una cartera hipotecaria con un volumen total de casi 500.000 millones de euros, un 95,2% del saldo vivo en todo el país a fecha de diciembre de 2016.
Si entramos a analizar cada situación en concreto, los datos nos ofrecen una visión más profunda del escenario hipotecario español. Y es que, siempre según el informe, un 67,3% del total de hipotecas tienen un plazo que vence en menos de 10 años, otro 14,1% lo hará en un período de entre 5 y 10 años y el 18,6% restante en menos de 5 años.Además, en el 63% de los casos se trató de hipotecas sobre la vivienda principal, mientras que para el 94,7% de los compradores se trataba de su primera hipoteca. Por comunidades autónomas, Catalunya (20,8%), la Comunidad de Madrid (17,4%), Andalucía (16,3%), la Comunitat Valenciana (10,1%), Canarias (6,7%) y Murcia (5,7%) son las que registraron la mayor parte de los préstamos de la cartera hipotecaria.
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