La salida paulatina de la crisis está dejando un panorama inmobiliario bastante más saneado que en años de pleno boom inmobiliario. De hecho, la aceleración del sector también está generando un aumento en el importe medio de las hipotecas que los bancos conceden a los compradores. Ese importe va íntimamente ligado al tipo de interés que cada entidad ofrece, el cual varía de forma notable dependiendo del país en el que nos encontremos.
Así, según los datos del Banco Central Europeo (BCE), las hipotecas más baratas de todo el continente europeo no están en potencias económicas como Alemania o Francia sino en Finlandia. El último informe que ha publicado la autoridad monetaria acerca de los tipos de interés sobre la vivienda afirma que el de 1,15% que aplicaba el país nórdico en el mes de julio es el más bajo de toda la eurozona. En Alemania, por ejemplo, el tipo de interés medio de las nuevas hipotecas es del 1,73%, en Francia se fijan en el 1,77% y en Austria alcanzaron el 1,87%. En el caso de España, el interés fue algo inferior: se quedó en el 1,91%, igual que en Portugal. La media de la eurozona se situó en el 1,92%, mientras que el promedio en países como Italia o Bélgica pasa del 2%.
En el otro extremo se sitúan países como Estonia, Grecia, Letonia, Chipre, Malta, Eslovenia e incluso Países Bajos, cuyos tipos de interés superan de largo el 2%. Irlanda se sitúa como el último de la lista con un interés medio del 3,24%, casi el triple que Finlandia.
En la comparativa interanual España se coloca en la décima posición de la lista de los 16 países de la eurozona que han vivido una caída de los intereses. En este sentido, las nuevas hipotecas se han abaratado un 9,9% en nuestro país, por el 16,1% en Finlandia y el 13,5% medio de la eurozona.
