La dinamización del mercado inmobiliario y el alto índice de operaciones también tiene su efecto en el mercado laboral. Según los datos de la EPA, la Encuesta de Población Activa, ya hay 149.100 profesionales trabajando en el sector. Son datos del segundo trimestre del año 2018, una cifra que no hace sino confirmar la recuperación del sector. En los meses de abril, mayo y junio se han incorporado al sector más de 13.000 personas, lo cual representa un crecimiento del 12,2%. En el mercado inmobiliario ya hay un 18,7% más de ocupación que hace una década. No solo se está recuperando tras la crisis, sino que está logrando superar las cifras más alcistas.
Existen muchas razones de estar superando los niveles precrisis. En el año 2007, una gran mayoría de las ventas se realizaban sobre plano. En cambio, hoy la mayoría de las ventas son de pisos ya existentes, lo cual requiere la intermediación inmobiliaria por parte de profesionales. La compraventa de vivienda por parte de fondos de inversión e inversores privados también está potenciando el empleo en el sector. El gran parque inmobiliario de cajas y bancos también requiere de la gestión y ayuda de agencias especializadas. Las características propias del mercado inmobiliario de 2018 están reforzando esta situación.
Y esta alza no solo se está notando en el empleo, sino también en los sueldos. Actualmente, la remuneración media anual de un profesional inmobiliario es 27.959 euros, lo cual representa una subida de 718 euros respecto al año 2017. En el caso de la administración inmobiliaria los sueldos casi se han duplicado, llegado a superar los 30.000 euros al año. El ranking de sueldos lo ocupan los comerciales inmobiliarios con 48.413 euros de sueldo medio anual. En su caso también se suman las comisiones que se suelen pagar en el sector por la consecución de objetivos.
