Como capital de Catalunya, la ciudad de Barcelona actúa como motor económico de la comunidad autónoma en su mercado inmobiliario. En este sentido, el sector de la construcción es donde destaca en una proporción más elevada teniendo en cuenta la superficie en la que se realizan y los habitantes implicados.
Según los datos de la Generalitat, el Área Metropolitana de Barcelona (AMB) acaparó el 64% de los visados de obra nueva de toda la comunidad autónoma en 2015. Esto significa que casi dos tercios de las licencias que se concedieron para construir casas fueron a parar a los municipios ubicados en la Ciudad Condal y sus alrededores. En concreto, de los 6.167 visados totales, Barcelona y su zona de influencia lograron casi 4.000, la mayor presencia proporcional de Barcelona sobre Catalunya en este sector desde que estallara la burbuja inmobiliaria. Sin embargo, en tiempos anteriores a la crisis los datos eran muy superiores en términos absolutos en cuanto al número de visados. Solo en el primer trimestre de 2007, la ciudad de Barcelona logró tantos visados como durante todo 2015 (algo más de 1.400).
En este sentido, entre 2007 y 2015 el número de permisos concedidos para empezar la construcción de viviendas ha descendido en un 89%. Los datos oficiales también añaden que, por primera vez en diez años, todos los municipios que forman el top 5 en cuanto al mayor número de visados obtenidos se encuentran dentro del Área Metropolitana de Barcelona: Barcelona, Badalona, Sant Cugat del Vallès, Terrassa y L’Hospitalet. En años anteriores siempre había estado presente algún municipio que no perteneciese a la AMB. Sin ir más lejos, en 2013 Sitges llegó a situarse en el segundo puesto, solo superado por Barcelona.
Los cambios territoriales que se están produciendo en la concesión de visados tiene el origen de su explicación en el dinamismo que está mostrando la zona de influencia de Barcelona y la menor demanda de nuevas residencias en el resto de provincias, en la que la recuperación económica se hace menos evidente y la demanda de nueva vivienda es inferior.
