Los colores no solo decoran nuestra casa, también afectan nuestro estado de ánimo. Un color dice mucho más de lo que pensamos, ya que es capaz de transmitir emociones y sentimientos en nosotros. Hay diversos estudios que muestran que los colores tienen efecto en nosotros, cada uno de forma diferente. Estos son algunos de los colores y la manera en que afectan nuestro animo a la hora de decorar nuestro hogar:
Colores cálidos
Este tipo de colores sirven para crear un ambiente acogedor y familiar, lo que los convierte en los colores perfectos para las zonas comunes. Combinándolos de forma atrevida lograremos hacer resaltar los diferentes elementos de la estancia.
Amarillos
El amarillo es principalmente un color de luminosidad. Una habitación amarilla es perfecta para crear un ambiente estimulante, por lo que es perfecto para habitaciones de niños.
Blanco
El blanco es símbolo de fuerza y limpieza, además de crear un ambiente de calma. La apuesta puede ir desde para una habitación concreta como el dormitorio o el salón hasta toda la casa. Todo depende del ambiente que queramos darle.
Azules
El azul está íntimamente relacionado con el cielo y el agua, por lo que predomina la sensación de paz y quietud. La serenidad y la tranquilidad son los efectos que conseguiremos apostando por este color.
Rojizos
Puede ser complicado aplicar este color, puesto que es fácil excederse y crear ambientes demasiados chillones. Sin embargo, puede ser una buena opción con moderación, pues nos transmitirá alegría y vitalidad.
Verdes
Su estrecha relación con la naturaleza le dará un ambiente especial a cualquier habitación, dado que un entorno natural produce un positivo efecto en nosotros. La relajación y equilibrio que lograras con el verde pueden ser la razón para aplicarlo en dormitorio o salones.