Esta es la afirmación de José García-Montalvo, catedrático de la Universitat Pompeu Fabra e investigador del Ivie. En unas recientes declaraciones, el académico ponía en duda las medidas que muchas de las administraciones españolas han puesto en marcha con el objetivo de controlar el precio de la vivienda. Algunas medidas pueden tener un impacto más suave en el mercado, como puede ser la construcción de viviendas de protección oficial. Pero en otros casos, como puede ser limitar por ley el precio del alquiler, puede contribuir a que esos inmuebles se retiren del mercado general y pasen al mercado negro del alquiler.
La crítica va especialmente dirigida a las medidas puestas en marcha por la Conselleria de Vivienda de Valencia. Esta administración se encuentra elaborando actualmente un índice de precios de referencia. La legislación estatal no permite que sea obligatorio, por lo que este servirá únicamente como referencia a arrendadores y arrendatarios. El plan es que todo aquel arrendador que alquile su vivienda siguiendo los precios de referencia podrá obtener beneficios fiscales. La Conselleria afirma que en Berlín ya se encuentra implantado este tipo de listado publico de precios, y que ha tenido efectos positivos en el mercado.
No obstante, García-Montalvo ha afirmado que los precios en Berlín siguen creciendo, y que la política de poner cotos al mercado no da los resultados esperados. También ha destacado que resulta incomprensible que la administración no aproveche el alto número de viviendas vacías que están en poder de los bancos para aumentar el parque de vivienda pública. También señaló la necesidad de que la vivienda pública no pueda ser vendida. En ese sentido, se declaró en contra de todas las medidas que puedan contribuir a reducir el parque de viviendas de oferta pública. Según este catedrático, la única solución pasa por ofrecer más vivienda pública para así dar acceso a la vivienda.