El sector terciario español sigue consolidándose como uno de los más atractivos a nivel mundial. Frente al posible agotamiento de los productos tradicionales, el interés de los inversores se extiende hacia nuevos nichos de rentabilidad con productos alternativos como las residencias de la tercera edad, de estudiantes o los espacios de coworking. Así, el volumen de inversión en edificios residenciales, oficinas, locales comerciales, hoteles, naves industriales y productos alternativos logró en 2018 su cuarto año consecutivo en positivo, con un crecimiento del 10% que permitió obtener una cifra récord y superar los 12.300 millones de euros.
Se espera que el sector de la logística seguirá trayendo nuevas oportunidades de inversión y mantendrá su impulso alcista ante el imparable crecimiento del comercio electrónico. La diversificación también llega al sector de las oficinas con la intención de cubrir la demanda en la periferia de las ciudades y gana fuerza con el desarrollo de los espacios de coworking en el centro de las grandes capitales. Por otro lado, la constante transformación del sector del retail está provocando que grandes marcas comerciales busquen establecerse en los grandes puntos de interés de las principales ciudades y la necesidad de crear centros logísticos a las afueras, atrayendo el interés de los inversores.
De esta manera, la evolución del sector terciario en grandes ciudades como Madrid y Barcelona se está viendo muy ligada al incremento de la demanda de locales comerciales, especialmente orientados a la restauración en las zonas prime de ambas urbes. Así, las rentabilidades pueden oscilar entre el 4% y el 6& dependiendo de la ubicación del local. El mercado barcelonés verá consolidar este año la demanda de espacios de oficinas de alquiler por parte de las compañías extranjeras, especialmente de las que trabajan en el sector tecnológico o digital.
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